Alergia e intolerancia a las proteínas de leche de vaca

Estos cuadros se pueden desencadenar cuando al bebé amamantado se le da leche artificial, o por el paso a la leche materna de las proteínas de leche de vaca (PLV) procedentes de los lácteos que toma la madre.

En la alergia la ingesta de PLV desencadena una reacción inmunológica mediada por IgE, que se puede manifestar por síntomas digestivos, cutáneos, respiratorios y anafilaxia. Se habla de intolerancia a las PLV cuando no hay un mecanismo inmunológico comprobado. En ambos casos se deben suprimir los lácteos de la dieta materna. La mayoría de los niños desarrollan tolerancia antes de los 3 años de edad.