Si durante el periodo de lactancia la mujer queda embarazada, puede seguir amamantando, si lo desea, durante el embarazo y después del parto dar el pecho a los dos hermanos (lactancia en tándem).
No se recomienda amamantar durante el embarazo en algunas situaciones especiales, como embarazo gemelar, antecedentes de abortos o partos prematuros.
Después del parto se produce calostro, que es clave para el recién nacido, por lo que se debe amamantar a éste siempre en primer lugar.
En la lactancia en tándem hay que mantener las medidas habituales de higiene. Si el lactante mayor presenta herpes, no debe ser amamantado, para evitar el contagio del recién nacido.